lunes, junio 25, 2007

Sobre el ejercicio ético de informar

Palmira, Junio 25 de 2007

Comunidad indígena
Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca -ACIN

Fraternal saludo

Agradecemos de antemano la atención prestada a nuestra carta de Junio 22 de 2007 y la forma franca y autónoma con la cual decidieron respondernos, pues, como lo anotan, Palmira sin infamia presentó información parcializada que no permitió que la opinión pública pudiese formarse un criterio autónomo de los acontecimientos y responsabilidades. Aunque presentamos y argumentamos los hechos que llevaron a la publicación de los comunicados, esto no remedia el daño.

No quisimos tratar de actuar ante esta situación de manera unilateral. Por ello esperamos tener respuesta de ustedes en lo concerniente a nuestra posición y el conocimiento de la suya.

Estamos de acuerdo en que la opinión pública debe conocer la verdad, pero ello no depende de la verdad que Palmira sin infamia emita en este caso. Y nuestra posición como respetuosamente la hemos comunicado es no desmentir o dar fe de uno u otro comunicado de las partes en conflicto. Seguimos considerando que la opinión pública debe formar su criterio autónomo y en aras de ello la publicación de su respuesta a nuestra carta en nuestro blog es un buen elemento para este cometido. Aclaramos además que Palmira sin infamia no es neutral ante las agresiones que históricamente han sufrido las comunidades del sector indígena, campesino y popular, agresiones que provienen de los gobiernos nacionales y extranjeros que actualmente adelantan macro y megaproyectos en territorio colombiano. Pero en este caso, al ser sectores que defienden intereses de sectores oprimidos y que en muchos momentos han luchado juntos por la tierra y la dignidad, guardamos distancia y seguimos invitando al diálogo, pues creemos que las palabras nunca se acabaran así en algunos instantes toque alejarnos de ellas.

En lo referente al punto en el cual nos comunican que no remitieron alguna queja o comunicación a Palmira sin infamia, creemos, además de sus argumentos, que hubo cierta prevención frente a nosotros por X o Y motivo. Y hoy, como vemos visto, si este diálogo hubiese ocurrido meses atrás, tal vez actualmente estaríamos hablando en otros términos y pensando en objetivos comunes, no sólo entre nosotros sino también con las partes en conflicto, ya que Palmira sin infamia queda a disposición de esta problemática para buscar salidas que fortalezcan la unión y luchas de todos los pueblos y sectores del Cauca en un objetivo común.

No siendo más por el momento y esperando que este diálogo sirva para dar un ejemplo de la responsabilidad y ejercicio ético que deben asumir los medios de información, nos despedimos sabiendo que las palabras han emergido con su fuerza vital.

Atentamente,

REDACCIÓN PALMIRA SIN INFAMIA





Respuesta de la ACIN a Palmira sin infamia
[ 06/19/2007] [ ] [ Autor: ACIN-CXAB WALA KIWE]
www.nasaacin.net




Señores
Palmira Sin Infamia

Fraternal saludo

Valoramos enormemente su carta de junio 22 en la que dan cuenta de los comunicados que han circulado y de su posición respecto a los problemas que nos aquejan. Lo reconocemos como un gesto sincero y constructivo.

Por supuesto, tenemos nuestra posición y nos parece indispensable, en aras de la verdad y la justicia, aclarar lo siguiente:

1.Uno de los motivos para no responder a los comunicados que se circularon fue precisamente que el contenido era tan distorsionado y tan contrario a los hechos y a la verdad, que expresaban la intención explícita de generar conflicto y deslegitimar el proceso indígena. Ante este tipo de contenidos, la organización encuentra la intención explícita de desinformar y generar divisiones.

2. Nos parece que en la práctica la distorsión mayor de los comunicados se repite y reitera por lo que la opinión pública no tiene elementos para formarse un criterio de los acontecimientos. Y es ese precisamente el problema: la opinión pública no puede formarse un criterio de los acontecimientos porque fue intencionalmente desinformada. La imagen que le queda a la opinión pública es la de un conflicto interno del proceso indígena y una cuestionable legitimidad de las autoridades indígenas del Norte del Cauca. En realidad, los hechos desmienten esta desinformación. El proceso y las autoridades demostraron su fortaleza y unidad en la práctica. Las comunidades unidas y en asamblea analizaron los hechos, reiteraron el respaldo al proceso y actuaron en derecho por la justicia y la defensa de los pueblos. Es más, quienes actuaron en contra de la comunidad asumieron su responsabilidad en asamblea y de manera pública y franca, lo que tuvo en cuenta la comunidad al tomar las decisiones jurídicas del caso. En consecuencia consideramos que no puede de una parte asumirse el costo político por desinformar o informar de manera parcializada y luego concluir que la opinión pública ya tiene elementos de juicio suficiente. La desinformación mal intencionada de las fuentes que ustedes reprodujeron ha impedido que la opinión pública pueda tener criterios basados en la verdad y esto, más que el costo político, es lo que debe corregirse. Nuestro llamado es a rectificar la desinformación para que la opinión pública pueda basarse en la verdad y que se reconstruya la armonía en las comunidades.

3. La lucha en resistencia contra un régimen que persigue y niega derechos fundamentales y la lucha por la LIBERTAD PARA LA MADRE TIERRA, que debe unir a los pueblos y que es la vocación y compromiso de las comunidades y pueblos que hacemos parte de la ACIN, es una urgencia y una prioridad, aún más presurosas a partir de la aprobación de la Ley de Tierras. En este contexto, la desinformación y la manipulación de un grupo reducido de personas para generar un conflicto contra el proceso indígena sólo le ayuda al régimen a debilitar y confundir a la opinión pública. Porque la lucha es por la Libertad para la Madre Tierra, nos duele el absurdo conflicto generado y la estrategia de mentirle a la opinión pública para distraer y desviar la lucha de resistencia.

4. Las autoridades restringieron la circulación de comunicados, precisamente para evitar generar en los medios un conflicto que no reflejaba la verdad. Hoy asumimos la carta que nos envían como un paso positivo en la perspectiva de clarificar los hechos e informar a la opinión pública. Por ello les invitamos a descubrir la verdad y a rectificar lo que circularon. Los hechos hablan con contundencia.

5. Reconociendo el espíritu sincero de su carta, la agradecemos a la vez que les recomendamos superar la contradicción que a nuestro juicio existe en ella: la opinión pública fue unilateralmente desinformada. Si este es el problema, la solución no está en asumir la desinformación como una versión y reconocer que hay otra para llamar al diálogo, sino informar la verdad para que pueda haber diálogo. Reiteramos nuestra disposición al diálogo y la unidad pero no sobre la base de admitir mentiras y dejar en la impunidad a quienes desinformaron (a ustedes y a la opinión pública) de manera intencional. En ese sentido les invitamos a comunicarse con las fuentes cuyo material reprodujeron. La verdad en los hechos demuestra que esa información estaba llena de falsedades. Investigar y clarificar esas distorsiones es el camino hacia la unidad, la justicia y la responsabilidad de la comunicación para la verdad y la vida. Actuar en consecuencia es dirigirse a quienes los desinformaron exigiéndoles la verdad y que asuman su responsabilidad por la desinformación intencional en la que incurrieron.


Esperamos que este intercambio sea constructivo recíprocamente y fortalezca y mejore el trabajo mutuo. Les invitamos a un espacio de diálogo con el Tejido de Comunicación de la ACIN para un conocimiento recíproco y una revisión de los hechos. Desde la verdad se hace justicia y se construye la comunicación para la vida.

Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca- ACIN
23 de junio de
2007