ASAMBLEA PERMANENTE
ESTUDIANTES UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA
SEDE PALMIRA
Los estudiantes de la UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA Sede Palmira, ante la arremetida privatizadora del actual gobierno por medio del plan nacional de desarrollo, específicamente en su artículo 38 que busca desobligar al Estado de su responsabilidad con el pasivo pensional de las Universidad Públicas del orden nacional, decidimos entrar en Asamblea Permanente desde el pasado lunes 7 de mayo de 2007 como muestra de rechazo. Desde ese día venimos programando diferentes actividades como foros, asambleas, conversatorios y movilizaciones para exigir al gobierno de Álvaro Uribe que objete dicho artículo y responda por el pasivo pensional.
Así, el día jueves 10 de mayo nos movilizamos por las calles de Palmira con la consigna de presionar al gobierno para que objetara el artículo 38; al siguiente día organizamos un foro sobre el Plan Nacional de Desarrollo para ampliar nuestro conocimiento sobre el nefasto plan y seguidamente sostuvimos una asamblea con el señor rector de la Universidad, Dr. Moisés Wasserman, quien trató, en vano, de desmontar la asamblea permanente.
Gracias a las movilizaciones organizadas a nivel nacional, el Presidente de la República se vio obligado a convocar una reunión con los rectores de las Universidades del orden nacional, a saber, U. Nacional, U. del Chocó, U. del Cauca, U. de Caldas y U. de Córdoba, reunión en la cual el presidente se negó a objetar el artículo en mención, a pesar de la argumentación dada por algunos profesores y estudiantes que acompañaban a los rectores, afirmando que las Universidades tenían que concurrir con el gobierno para sanear el pasivo pensional.
Debido a ello, los estudiantes convocamos nuevamente a una movilización que contó con la participación de los estudiantes de Univalle, el SENA, colegios de secundaria y diferentes sectores sociales, esta vez con el objetivo de hacer un plantón en la recta Cali-Palmira y desde allí llamar la atención de los medios de comunicación y la opinión pública para que todo el pueblo colombiano se enterara de lo que estaba sucediendo. La movilización, que tenía un carácter pacifico, fue vilmente reprimida por la fuerza pública que de manera brutal arremetió contra los protestantes dejando un saldo de dos heridos.
Ante estos hechos, los estudiantes manifestamos nuestra convicción de seguir en pie de lucha por la defensa de la educación pública con calidad y financiada por el Estado, denunciamos la brutal forma con que se trata de reprimir nuestra legitima protesta y exigimos al gobierno nacional, en cabeza de Álvaro Uribe Vélez, que responda con sus obligaciones constitucionales, así como llamamos a toda el pueblo colombiano a unirnos en un solo bloque por la defensa de nuestros derechos como son la educación, la salud y el trabajo digno.
Así, el día jueves 10 de mayo nos movilizamos por las calles de Palmira con la consigna de presionar al gobierno para que objetara el artículo 38; al siguiente día organizamos un foro sobre el Plan Nacional de Desarrollo para ampliar nuestro conocimiento sobre el nefasto plan y seguidamente sostuvimos una asamblea con el señor rector de la Universidad, Dr. Moisés Wasserman, quien trató, en vano, de desmontar la asamblea permanente.
Gracias a las movilizaciones organizadas a nivel nacional, el Presidente de la República se vio obligado a convocar una reunión con los rectores de las Universidades del orden nacional, a saber, U. Nacional, U. del Chocó, U. del Cauca, U. de Caldas y U. de Córdoba, reunión en la cual el presidente se negó a objetar el artículo en mención, a pesar de la argumentación dada por algunos profesores y estudiantes que acompañaban a los rectores, afirmando que las Universidades tenían que concurrir con el gobierno para sanear el pasivo pensional.
Debido a ello, los estudiantes convocamos nuevamente a una movilización que contó con la participación de los estudiantes de Univalle, el SENA, colegios de secundaria y diferentes sectores sociales, esta vez con el objetivo de hacer un plantón en la recta Cali-Palmira y desde allí llamar la atención de los medios de comunicación y la opinión pública para que todo el pueblo colombiano se enterara de lo que estaba sucediendo. La movilización, que tenía un carácter pacifico, fue vilmente reprimida por la fuerza pública que de manera brutal arremetió contra los protestantes dejando un saldo de dos heridos.
Ante estos hechos, los estudiantes manifestamos nuestra convicción de seguir en pie de lucha por la defensa de la educación pública con calidad y financiada por el Estado, denunciamos la brutal forma con que se trata de reprimir nuestra legitima protesta y exigimos al gobierno nacional, en cabeza de Álvaro Uribe Vélez, que responda con sus obligaciones constitucionales, así como llamamos a toda el pueblo colombiano a unirnos en un solo bloque por la defensa de nuestros derechos como son la educación, la salud y el trabajo digno.
Palmira, 17 de mayo de 2007
